Enzo Cuevas deberá donar la suma de G 100.000.000 en un plazo de 36 meses como reparación social del daño causado. El Ministerio Público señaló que el procesado terminaría condenado a una pena irrisoria en un juicio oral, por ende, consideraba que la aplicación de una salida procesal en esta etapa era más acorde.

El juez del caso, Yoan Paul López hizo lugar a la propuesta de la defensa al que se allanó la fiscalía y ordenó la suspensión del presente procedimiento por un periodo de prueba de tres años.

El magistrado ordenó las siguientes reglas de conducta para Enzo Cuevas, como: la comparecencia trimestral del procesado ante el juzgado de ejecución penal interviniente de la Capital entre los días 01 al 10 del mes que debe comparecer, a partir del mes de julio de este año.

Así como la obligación de comunicar 48 horas antes la salida e ingreso al país al juzgado de ejecución, la prohibición de cambiar el domicilio asentado en el expediente, sin previa comunicación al juzgado de ejecución; la prohibición de cometer otros hechos punibles; la prohibición de portar todo tipo de armas.

También, tiene la obligación de realizar en concepto de reparación del daño social en concepto de justicia restaurativa, la entrega de la suma de Gs. 100.000.000 por el periodo de tres años que deberá ser abonado en 36 meses.

Los beneficiarios de la donación de Cuevas son; la Parroquia San Pablo Apóstol, la Congregación del Espíritu Santo Bajo la Protección del Inmaculado Corazón de María y la Fundación Jesuitas. El primer pago ya le vence este mes de mayo y la suma que debe abonar a cada entidad es de G 33.333.324 por tres años hasta cubrir los G 100.000.000.

El procesado deberá presentar ante el juzgado todas las boletas de pago referido a cada entidad beneficiaria de la donación el primero en recibir la donación será la Parroquia San Pablo Apóstol.