«Para nosotros estas imputaciones a los que somos sobrevivientes de aquel atentado y aquel crimen, terrorismo de Estado. Es evidentemente una gran persecución de la mafia que ha tomado el poder político, es una persecución de Horacio Cartes y de toda su gavilla, de Sandra Quiñónez, fiscala general de la Mafia, jueces, fiscales, para nosotros es una persecución, pero nosotros no vamos a mirar pasivos como ellos intentan someter a los pocos paraguayos que estamos luchando de frente», señaló.