“Nos damos cuenta de que existía algo un poco raro en la aeronave de nombre Emtrasur. También vemos que hay siete iraníes. Como viene de un país considerado por nosotros de riesgo, empezamos a ver esos nombres una vez que nos llegan los datos, empezamos a chequear los nombres nosotros, no nos llegó ninguna alerta como se dijeron en algunos lugares que nos avisó EE.UU, que nos avisó tal cosa. No, nosotros empezamos como paraguayos, como SNI Paraguay, a ver de qué se trata esa aeronave”, explicó.

El 26 de mayo, según siguió relatando, agencias estratégicas de extrarregión confirmaron las sospechas sobre el transporte y el piloto, identificado como Ghomlareza Ghasemi, vinculado directamente por el FBI con las fuerzas Quds de la Guardia Revolucionaria de Irán.

Aquino señaló que la Argentina tomó acciones con respecto a la aeronave gracias al reporte de Inteligencia de Paraguay, en fecha 6 de junio. En tanto que el 8 de junio se alertó a Uruguay de que el avión intentaría salir del aeropuerto de Ezeiza, Argentina, donde está retenido, hacia su territorio.

También en fecha 8 de junio la aeronave solicita ingresar al Paraguay, pero Inteligencia pidió a la Dirección Nacional de Aeronáutica Civil (Dinac) que rechace el ingreso. El 12 del mismo mes insisten en el pedido y nuevamente se rechaza.

En Argentina, la justicia investiga a los tripulantes por supuestos vínculos terroristas, no así la carga de autopartes de México, como tampoco contra algún funcionario o autoridad que permitió la llegada del avión carguero.