Pretenden encubrir la criminal acción de 11 agentes policiales, hoy día, recluidos en la Agrupación Especializada de la Policía, como responsables ahora del doble homicidio en que perdió la vida de manera instantánea, Enrique Alejandro Ortiz Espínola y, el martes último, se dio el óbito de su pareja Gloria Yetsica Espínola Cáceres, convirtiéndose en la segunda víctima fatal del mortal error de miembros de la fuerza pública. Todos pretendían obtener medidas menos gravosas ya previamente concedidas, pero aún sin presentar el pedido de revisión pertinente por parte de los defensores técnicos.

SIN INDICIOS

Los fiscales Vanesa Candia, Alcides Giménez y Juan Daniel Benítez no hallaron indicios de la presunta persecución, atendiendo que las patrulleras utilizadas para la comisión del crimen no contaban con rastros de proyectiles en ninguna de sus partes. En las filas policiales no se registró herido alguno, por tanto, tampoco hay vestigios de probable enfrentamiento. Lo que para la Policía fue apenas una lesión se convirtió en luto para la familia de Gloria Espínola, que no resistió a las consecuencias de los seis impactos de bala y perdió la vida a manos de los criminales que fungían de guardianes del orden.

DESIDIA FISCAL

Al momento del procedimiento en la fatídica noche del 21 de noviembre último, la fiscal Olga Melgarejo interinaba la unidad de turno a cargo de su colega Candia, pero no acudió al lugar de los hechos, dejando libre la vía para que los protagonistas de los homicidios, hagan e informen a su conveniencia, los sucesos que terminaron en dos óbitos. En ese contexto, el equipo fiscal ya detectó varias falencias que apuntan a variaciones en la escena del suceso, como el abandono de los 11 policías. Para sostener el enfrentamiento, la Policía presentó un arma de fuego que sigue esperado el peritaje requerido en carácter de anticipo.

NUEVO LLAMADO

La fiscal Candia adelantó ayer a La Clave que el equipo investigador resolvió llamar a los 11 procesados para dar cumplimiento a lo establecido en el artículo 350 del Código Penal, referente a los trámites procesales para garantizar el debido proceso. Es decir, notificarles sobre el fallecimiento de la segunda víctima. El hecho complica severamente la situación legal de los 11 reclusos.

INVOLUCRADOS

En la causa penal abierta están procesados el entonces jefe de investigaciones, comisario principal Hugo Regis, ex jefe de operaciones; Manuel Ramón Villalba Gómez ye el suboficial principal Richard Antonio Sebriano Silvero, con frondosos antecedentes, incluso en caso “Cucho” Cabañas. Todos son del departamento de Investigación de Delitos.

Del Grupo Especial de Operaciones (GEO) están recluidos, el oficial 1° Roberto Samaniego Parquet y los suboficiales CÉsar González Agüero, Javier Antonio Martínez Ocampos, Alfredo Villalba Agüero, Ruben Darío Giménez Maidana, Jaime Javier Ramírez Britez, Alder Centurión Céspedes y Pedro Osvaldo Brítez Achar.