La muestra fue realizada del 23 al 26 de marzo del 2020, por medios virtuales, con base en 364 empresas consul­tadas de diferentes sectores y tamaños, compuesta por 61 cuentapropistas, 240 mipy­mes y 94 empresas grandes, donde 11 son del sector agro­pecuario, 94 comercial, 54 industrial y 205 de servicios.

En cuanto a la situación financiera de las empresas, el 47% está en una situación mala o muy mala, principal­mente los cuentapropistas y microempresas del sec­tor de servicios y comercio, mientras que el 25,5% en una situación buena o muy buena, que tiene que ver con las empresas medianas o gran­des. También las de venta de productos alimenticios, sec­tor de la construcción, servi­cios financieros y salud.

Sobre el impacto en las ven­tas, el 78% de las empresas reportó que sus ventas dis­minuyeron al menos 20%. Los rubros más afectado fue­ron, en su mayoría, cuentas­propistas y microempresas de comercio y servicios, que incluso ven disminuciones de entre el 60 y 100%.

FALTA DE LIQUIDEZ

Mentu reporta que la falta de liquidez es el mayor pro­blema actual de las empresas. “El Estado dispuso medidas paliativas para las empresas, no obstante, estas solo llega­rían a las empresas formales, mientras que las empresas menos formalizadas tendrán dificultades para acceder a ellas”, señala.

El 51% de las empresas miti­gará sus problemas financie­ros con opciones diferentes a créditos, lo que demuestra que la dificultad en el acceso al sis­tema financiero formal limi­taría la financiación a través del mismo.

EXPECTATIVAS

Casi 50% de las empresas consultadas no ven una pronta recupera­ción de la situación, mientras que el 45% espera vender menos en los próximos 12 meses. De ellas, el 81% es cuentapropista o mipy­mes. Al analizar solo a las mipymes, el 46% espera que sus ventas disminuyan en los próximos 12 meses y el 60% de las empresas medianas tienen expectativas de ventas menores.

La encuesta muestra que las principales áreas de las empresas que fueron afectadas son las que tienen mayor contacto con los clien­tes. “Las empresas tienen una menor dotación de personal, lo que limita su producción”, enfatiza el reporte.