Los videos, geolocalizados y verificados por CNN, muestran a soldados ucranianos retirando banderas rusas de edificios públicos en el distrito de Sudzhansky, en la región de Kursk. En uno de los videos, se observa cómo los soldados retiran la bandera rusa del edificio del consejo del pueblo de Sverdlikovo y la arrojan al suelo. Otro video muestra a tropas ucranianas izando su bandera nacional en el edificio del club del pueblo de Guevo, en la misma región.

Esta incursión se produce en el contexto de una operación militar ucraniana más amplia, en la que cientos de tropas, respaldadas por tanques y protegidas por defensas aéreas, han avanzado hacia la región de Kursk. La magnitud y la audacia de esta operación han tomado por sorpresa a muchos observadores internacionales y representan un desafío directo a las defensas rusas en su propio territorio.

El presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, confirmó la presencia de tropas ucranianas combatiendo dentro de Rusia. En declaraciones realizadas el sábado, Zelensky afirmó que esta incursión demuestra que Ucrania «sabe realmente cómo restablecer la justicia». Estas palabras sugieren que la operación podría tener objetivos tanto militares como simbólicos, buscando desafiar la narrativa rusa sobre el conflicto.

La reacción de Rusia a esta incursión aún no se ha hecho pública en detalle, pero se espera que sea contundente. Este evento representa una vergüenza significativa para el Kremlin, que ha mantenido durante mucho tiempo que las fuerzas rusas tienen el control total de sus fronteras y territorios. La incursión ucraniana pone en duda esta afirmación y podría tener implicaciones importantes para la percepción pública de la guerra tanto en Rusia como a nivel internacional.

Fuente: CNN