La esperada reforma de la Policía Nacional estaría cerca de convertirse en realidad, según lo adelantado por el ministro del Interior, Enrique Riera, luego de una reunión con la bancada oficialista en la Cámara de Diputados. Se espera que los más de 280 artículos del proyecto sean aprobados sin modificaciones, a pesar de las críticas y objeciones presentadas por diversos sectores.

Riera admitió que la ley no es perfecta, pero defendió el proyecto argumentando que cuenta con seis años de estudio y representa un equilibrio entre lo ideal y lo posible. Sin embargo, se comprometió a presentar modificaciones a la ley una vez que sea promulgada, teniendo en cuenta las observaciones realizadas por un sector de las Fuerzas Armadas, funcionarios civiles que trabajan en la Policía y agentes retirados.

La estrategia del Ministerio del Interior es aprobar la ley en su estado actual y posteriormente realizar las correcciones necesarias en la reglamentación. Riera explicó que si se modificara un artículo en Diputados, el proyecto tendría que volver a Senadores, lo que retrasaría significativamente su aprobación y dificultaría la asignación presupuestaria.

El impacto económico de la reforma policial se estima en unos 100 millones de dólares adicionales al año para la institución. Riera destacó que la ley no establece la obligatoriedad de las barreras, pero sí las autoriza como herramientas para buscar prófugos y controlar delitos, asegurando que el «ciudadano de bien» no debe preocuparse.

En cuanto a los casos de gatillo fácil o implantación de drogas, el ministro pidió no generalizar a los agentes, destacando que la mayoría de los 29.000 policías arriesgan sus vidas por la seguridad de la ciudadanía. Además, se mostró a favor de implementar las “bodycam” o cámaras para cada agente policial, con el objetivo de controlar su actuar.

Riera también abordó la falta de renovación de servicios informáticos en la Policía durante el gobierno anterior, lo que llevó a la desactivación de sistemas por falta de pago de licencias, soporte y mantenimiento. Gracias al apoyo de Itaipú, se logró restablecer el sistema de verificación balística y de huellas.

La reforma policial busca modernizar y reestructurar la institución, y aunque el proyecto de ley no sea perfecto, representa un paso importante hacia ese objetivo. Las modificaciones prometidas en la reglamentación buscarán atender las preocupaciones de los diversos sectores involucrados y fortalecer aún más a la Policía Nacional.

El ministro Riera se mostró optimista respecto a la aprobación de la ley en Diputados y subrayó la importancia de iniciar el proceso de transformación de la Policía, aunque reconoció que serán necesarias correcciones posteriores. La reforma policial es un tema de gran interés para la ciudadanía, que espera mejoras en la seguridad y un desempeño más eficiente y transparente de la institución.

En los próximos días se definirá el futuro de la reforma policial en el Congreso, y se esperan con expectativa los detalles de las modificaciones que se realizarán en la reglamentación para atender las preocupaciones y fortalecer aún más a la Policía Nacional en beneficio de la seguridad de todos los paraguayos.

Fuente: ABC Color